¿Por qué se puede oscurecer un diente?
Muchos pacientes acuden a menudo a consulta porque perciben un cambio de color en algún diente en particular. Esto puede ser debido a distintas causas:
- Caries: El diente puede adquirir un tono negruzco en la zona de dentina infectada por caries. En estos casos con un tratamiento restaurador mediante composite, suele ser suficiente.
- Necrosis del nervio: Puede estar asociado a caries o a un traumatismo en el diente. El cambio de color puede incluso aparecer muchos años después de dicho golpe. Suele ser un color grisáceo. En este caso habría que realizar primero un tratamiento endodóntico, que consiste en retirar el nervio necrosado y desinfectar la raíz. Posteriormente, se puede blanquear el diente desde su interior para corregir el color grisáceo e igualarlo al diente adyacente.
- Esclerosis del nervio: Tras un traumatismo el nervio puede calcificarse. En este caso la tinción suele de color amarillo parduzco. Si no existen signos de infección, podría tratarse realizando un blanqueamiento externo localizado únicamente en ese diente, hasta igualarlo al diente adyacente.
- Tinción por metales: Esto es debido a la pigmentación de la dentina por, por ejemplo, obturaciones de amalgama. Estos casos son más complejos de solucionar y en ocasiones requieren de la realización de una carilla dental o corona.
- Tinción por endodoncia: Una vez realizado el tratamiento endodóntico, se puede teñir el diente por exceso de material en la corona visible del diente. En este caso se soluciona retirando el exceso de material y blanqueando el diente desde su interior.
En función del motivo y tonalidad que tenga el diente, el odontólogo planificará un tratamiento u otro.
En muchas ocasiones, el cambio de color es el primer signo de que existe un problema en el interior del diente, por lo que es importante no ignorarlo y acudir a una valoración del mismo.