Hoy en día cada vez es más frecuente ver niños muy pequeños acudir a sus revisiones con el dentista. Es una forma de evitar o diagnosticar más rápido cualquier problema o caries en estos pequeños. A su vez, raro es el día que no nos encontramos niños con problemas de policaries debido a la gran ingesta de azúcares que conlleva su dieta.
A muchos padres les cuesta entender el motivo y más cuando nos refieren que “¡mi hijo no toma dulces!”. Si hacemos un repaso de la dieta de nuestros peques, a la hora de preparar el almuerzo o la merienda, un alto porcentaje de ellos pueden encontrar en su mochila: el paquete de galletas, zumo, bollería industrial, sándwich… todo ello, algo cómodo tanto para los padres como para el niño a la hora de estar seguros de que se lo coman.
¿Qué alimentos son perjudiciales para su salud?
Cualquier alimento con azucares añadidos como pueden ser: golosinas, chocolate, bollería industrial, galletas, zumos embasados, bebidas con gas, cajas de cereales, patatas de bolsa, yogures líquidos, pan de molde (el sándwich de toda la vida).
¿Y qué alimentos son los adecuados para nuestros hijos?
- El Agua: Lo más sano y que más rápido quita la sed.
- Pan de barra: Presenta menos azúcar que el de molde.
- Fruta: es dulce como el chocolate y mucho más sano, además se lo podemos preparar cortadito para que les sea más cómodo. Además, indirectamente les estamos ayudando en su desarrollo y crecimiento debido a que, la fuerza que hacen nuestros peques al comer una manzana, masticar el pan de barra o una zanahoria, por ejemplo, les hace trabajar y desarrollar esos músculos y hacerlos más fuertes.
No olvidemos que el consumo prolongado de azúcares es un posible problema futuro de desarrollar sobrepeso u obesidad, unido en ocasiones a generar diabetes mellitus tipo 2, enfermedades del corazón y como no, caries.
Recordad que nuestros pequeños se deben cepillar tras cada comida que hagan, ya sea en casa o en el colegio.